Reforma del Código Penal en España para establecer sanciones justas en caso de abandono o maltrato

El Gobierno español quiere presentar antes de que acabe el año un anteproyecto de ley de Protección Animal con medidas destinadas a la tenencia responsable y trabaja en la reforma del Código Penal para establecer sanciones justas en caso de abandono o maltrato.

La ministra de Derechos Sociales y Agenda 2030, Ione Belarra, lo ha anunciado así en su respuesta a una interpelación urgente presentada en el Congreso por el grupo parlamentario Ciudadanos, en la que se interesaba por el plan normativo del Gobierno en materia de bienestar animal y por el trabajo de la la Dirección General de Derechos de los Animales, a la que han acusado de “inacción” en el año que lleva en funcionamiento.

El diputado de Ciudadanos Guillermo Díaz Gómez, encargado de defender la interpelación de su grupo, ha recordado que a lo largo de su trayectoria esta Dirección General sólo ha traído a la Cámara la petición de reforma del Código Civil para que los animales dejen de considerarse cosas y pasen a ser seres sintientes, petición que presentó su formación y que fue aprobada por unanimidad.

Más de 300.000 perros y gatos abandonados al año

Díaz Gómez ha reclamado la reforma del Código Penal para acabar con los casos de maltrato de animales que dan lugar a tortura y sufrimiento o con los que cada año provocan más de 300.000 abandonos de perros y gatos y en general, para frenar los comportamientos crueles “de personas que tienen algún cable pelado en la cabeza y son capaces, por ejemplo, de untar a un gato con brea para después prenderle fuego”, ha afirmado.

“En Ciudadanos creemos que se deben aumentar las penas de cárcel y prohibir la tenencia de animales a las personas que manifiesten conductas psicópatas y que empezaron ensayando con animales sus carreras de asesinos en serie”, ha declarado el diputado.

En su exposición ha detallado algunas de las medidas que su grupo parlamentario desea que se incluyan en la futura ley de Protección Animal, como la creación de un banco nacional de microchips identificativos, mejores controles de criadores, impedir la exposición de mascotas en escaparates para evitar la venta “por impulso”, o promover actuaciones que favorezcan la adopción.

Ha asegurado que Ciudadanos votará a favor de la futura ley estatal de Protección Animal si además de estas medidas incluye otras como la prohibición del sacrificio de animales abandonados sanos, salvo en caso de emergencia o peligrosidad; que no se mutile a las mascotas por motivos estéticos o la creación de un registro de infractores de los derechos de los animales.

El diputado ha pedido asimismo que se multe con hasta 3.000 euros a las personas que se diviertan torturando animales o que el Gobierno “repiense” reformar en la futura ley las normas actuales de tenencia de perros peligrosos y tenga en cuenta factores que vayan más allá de la sola pertenencia a una raza determinada.

Vídeo vigilancia en mataderos y laboratorios

La ministra de Derechos Sociales ha respondido que el Gobierno planea incluir muchas de esas peticiones en la ley que quiere poner pronto en marcha y que además recogerá normativas como la obligación de instalar cámaras de vídeo vigilancia en mataderos o laboratorios de ensayos para poner fin a situaciones de maltrato como la que se detecto recientemente en la empresa Vivotecnia de Tres Cantos (Madrid).

También ha dicho que se está trabajando en la reforma del Código Penal para endurecer las sanciones por maltrato o abandono de animales vertebrados, que se está desarrollando un Real Decreto de perros de asistencia y otro para crear un sistema nacional de registros que permita localizar a cualquier animal en caso de pérdida o de abandono, y que sólo podrán vender animales ‘online’ quienes tengan licencia de núcleos zoológicos.

Belarra ha subrayado el papel que ha desempeñado su Departamento durante la pandemia para hacer frente a situaciones de emergencia y atender a las mascotas de personas enfermas, sin hogar, o a las de las más de 500 víctimas de violencia de género que no han querido dejar a sus animales en manos de sus maltratadores.